domingo, 24 de abril de 2016

2da VUELTA, CONTRA EL NEOLIBERALISMO: ¡VOTO VICIADO!

El colectivo Dignidad Nacional, en las nuevas circunstancias de la segunda vuelta, se pronuncia considerando algunos aspectos importantes a tener en cuenta.
La primera vuelta electoral demostró que el Estado y sus instituciones son instrumentos del poder económico, que controla asimismo la prensa y la televisión del país y hace consentir como bueno lo que le beneficia y como malo lo que le perjudica.
Como parte de ello, el jurado electoral, se encargó de sacar de carrera a quienes provocaban una dispersión del voto (Guzmán y  Acuña) y allanar el camino a sus preferidos (Keiko y PPK), haciendo y deshaciendo a su gusto para garantizar la continuación del neoliberalismo.
La candidata alternativa, Verónika Mendoza, fue satanizada como “terrorista” y en la víspera de las elecciones se produjo un extraño atentado en el Vraem, con el único propósito de sembrar temor en los votantes.
Los candidatos y sectores que se manifestaron por un cambio de la situación dieron una batalla de principios pero demostraron —y en ello nos incluimos— no tener el suficiente desarrollo, superando la dispersión y debilidad organizativa, como para asegurar un mayor esclarecimiento y educación política de la población. 

TANTO KEIKO COMO PPK SON NEOLIBERALES Y NO CAMBIARÁN LA ESENCIA DE LA SITUACIÓN EN EL PERÚ: han de continuar promoviendo —y más aún buscarán profundizar— la política de sus antecesores que consiste en: 1) La entrega de los recursos naturales y servicios (agua, transporte, telecomunicaciones, internet, etc.) a monopolios privados en perjuicio de la independencia y el bolsillo de los peruanos. 2) El consentimiento de explotaciones que afectan a la población y el medio ambiente sin hacer el alto a las grandes mineras ni establecer zonas reservadas. 3) La firma de contratos lesivos que benefician a grupos económicos contra el interés del pueblo, como ocurrió con el gas de Camisea precisamente por gestión de PPK. 4) El recorte de los derechos de los trabajadores y mantenimiento de leyes antilaborales, y de la voracidad de las AFPs. 5) La postergación de una educación de carácter nacional, humanista y científica y la promoción de antivalores a través de la televisión y prensa basura, con el fin de mantener una población con pésimo nivel cultural para dominarla fácilmente. 6) El asistencialismo a través de dádivas que no son sino migajas que salen del mismo cuero del pueblo, de los impuestos que recauda la vampira Sunat a los pequeños empresarios, mientras perdona la millonaria deuda de Telefónica. 7) El mantenimiento de un sistema de producción primario exportador y la renuncia a desarrollar una industria nacional.
En síntesis, ninguno está comprometido a realizar cambios profundos empezando por el cambio de la nefasta constitución fujimontesinista que permite, avala y propicia todo esto.
¿Qué pueden hacer ambos candidatos contra la corrupción cuando son opuestos a levantar el secreto bancario y Keiko no es sino la cabeza de un grupo con probadas acciones y ansias de enriquecimiento a costa del Estado y el pueblo? ¿Qué espíritu nacional pueden sembrar cuando el corazón de ambos no siente sino desprecia a las masas profundas y a la cultura nuestra? ¿Qué nos puede decir Keiko sobre la inseguridad ciudadana cuando sus adeptos promovieron las bandas en el Callao cuyo modelo se fortaleció y extendió a nivel nacional?
Por eso creemos, el 5 de Junio corresponde EXPRESAR NUESTRO RECHAZO AL SISTEMA NEOLIBERAL Y A SUS CANDIDATOS CON EL VOTO VICIADO. No debemos ser cómplices del mayor despojo que se viene, ni compartir el saqueo y el latrocinio de quienes ya se frotan las manos.
Las fuerzas políticas que no hemos traicionado el principio de servir al pueblo, debemos trabajar con visión estratégica en su educación política, apuntando a fortalecer sus luchas, generar nuevos y consecuentes representantes y emprender los debates necesarios con vínculos que sirvan a desarrollarnos y avanzar con pequeñas conquistas hacia mayores en el camino postergado.
Y quienes han sido electos, al margen de su minoría, deben mantenerse en el Congreso, como portavoces y defensores de los intereses del pueblo, como críticos del sistema. Sólo así lograrán mayor respeto y consolidarán lo logrado.
Esta segunda vuelta, remarcamos, es como si se nos llamara a escoger entre dos gemelos, hermanos de sangre de la derecha neoliberal. Por eso, el voto viciado y el voto en blanco están en aumento y hay quienes (no sólo nosotros) empiezan a promoverlo con vehemencia.
Sin embargo, entendemos que existe un grueso sector de la ciudadanía con un frontal e invariable rechazo al fujimorato —incluidos sectores afectados, familiares o amigos de quienes sufrieron crímenes funestos como es el caso de los desaparecidos de la Cantuta o las víctimas de las esterilizaciones forzadas— que se manifestó en las marchas multitudinarias del reciente 5 de abril. Dicho sector prefiere —y es comprensible— cerrarle el paso a Keiko.
Nosotros creemos que el accionar neoliberal, de la mano con el despojo y negación de derechos, por parte de cualquiera de los dos, desatará mayor conflictividad social, y en esa resistencia, en esas batallas del lado del pueblo, esforzándonos por entendernos y convergir, debemos encontrarnos las diversas fuerzas de la población peruana.
La brega por el Perú justo y soberano que muchos anhelamos sigue en pie.

¡CONTRA LA CONTINUACIÓN Y PROFUNDIZACIÓN DEL NEOLIBERALISMO: VOTO VICIADO!

¡POR UNA NUEVA CONSTITUCIÓN AL SERVICIO DEL PUEBLO!

¡VIVAN LAS LUCHAS DE LOS PUEBLOS DEL PERÚ!